Cuando pensamos en el coral o arrecife de coral, usualmente imaginamos una entidad ajena, una especie de jardín submarino del que solo los habitantes inmediatos se benefician y que existen allá lejos en los documentales de National Geographic o en los relatos fantásticos de Julio Verne. Incluso a veces, les pensamos (si es que eso sucede en el día a día urbano) como una estructura submarina tan independiente y alejada de nosotros como cualquier enigma que habita el fondo del océano, pero no podríamos estar más errados.
Los arrecifes de coral son en sí mismos ecosistemas que albergan una enorme diversidad biológica que contribuye inadvertidamente a nuestra existencia. Las algas que habitan en ellos se alimentan del dióxido de carbono y a través de su proceso de fotosíntesis limpian el oxígeno que necesitamos como especie para sobrevivir, pero lo hace por un alto precio a cambio.
Son también los guarda velas y principales mensajeros del cambio climático: Cuando el coral se estresa, se blanquea y ello sucede cuando la temperatura del agua comienza a hacerle daño o cuando utilizamos protectores solares que contienen químicos que detienen la fotosíntesis del arrecife, o cuando somos insensatos con la cantidad de basura que generamos y desechamos. Cada pólipo y alga vive en simbiosis para crear el jardín fantástico submarino en el que cohabitan cientos de especies en armonía y son el paraíso de fantasía de miles de turistas y buzos que viajan por el mundo para maravillarse, sin imaginar o pensar el inmenso peligro en el que se encuentran estos sistemas como consecuencia de nuestro estilo de vida.
Los arrecifes de Cozumel, están incluídos en las listas internacionales de destinos de buceo más hermosos. Y con ello los visitantes anuales a la isla y los buzos internacionales han incrementado, no siempre generando un impacto positivo para su supervivencia o saneamiento.
Existen organizaciones y guardianes de estos paraísos submarinos y en esta ocasión la Fundación Mar y Ciencia representada por la bióloga marina Catalina Velasco y la bióloga marína Karen Echeverría representante de BeDiving iniciarán la conversación al respecto. Y nos acompañarán a contestar las siguientes preguntas y las que surjan: ¿Por que a pesar de que los arrecifes son tan importantes para la vida en la tierra? ¿Qué es específicamente el blanqueamiento de coral? ¿Como sucede? ¿Cómo reconocemos un arrecife enfermo de otro? Y sobre todo ¿Qué podemos hacer aún?
Les esperamos el próximo miércoles 17 de abril a las 8:00 pm en la Mezcalteca para compartir chelitas, mezcales y reflexiones de las profundidades
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